Hope for the Widow: Psalm 68

Psalm 68:4-7
4 Sing unto God, sing praises to his name: extol him that rideth upon the heavens by his name Jah, and rejoice before him.
5 A father of the fatherless, and a judge of the widows, is God [Elohim] in his holy habitation.
6 God setteth the solitary in families: he bringeth out those which are bound with chains: but the rebellious dwell in a dry land.
7 O God, when thou wentest forth before thy people, when thou didst march through the wilderness; Selah:

Psalm 68, written by David, is a song of praise to God. In the middle of the Psalm, there is a portion that calls for singing of praise to JAH = Yahweh, the existing One. This is the only time in the Old Testament that Jehovah’s name is used in this form; all other incidents are LORD. The people of God in the Old Testament felt Jehovah’s name too sacred to speak or even write out. Yet, here, in reference to the fatherless and the widows, an intimate knowledge and familiarity is seen. He is known by His character, by His name.

He is a Father – ab – meaning benevolent protector of those with no father.

He is a Judge – dayan – door of life- of the widow. The word widow here is one bound in grief like a sheaf of wheat.

To the widow bound in her grief, He is the One Who restores life as Elohim—our Strong One.

What imagery! As a widow, when I feel bound, unable to do what needs to be done; feeling trapped by all the feelings that overwhelm me, He “gets it”. He is working to restore life. He offers a unique avenue of knowing Him and being known by Him in these difficult places. He alone knows the path to the doorway of life after loss. Let Him work.

EN ESPANOL…

Esperanza para la Viuda: Salmo 68

Salmo 68:4-7
4 Cantad a Dios, cantad salmos a su nombre; exaltad al que cabalga sobre los cielos. JAH es su nombre; alegraos delante de él.
5 Padre de huérfanos y defensor de viudas es Dios en su santa morada.
6 Dios hace habitar en familia a los desamparados; saca a los cautivos a prosperidad; mas los rebeldes habitan en tierra seca.
7 Oh Dios, cuando tú saliste delante de tu pueblo, cuando anduviste por el desierto, Selah.

El Salmo 68, escrito por David, es un cántico de alabanza a Dios. En medio del salmo, hay un llamado a cantar alabanzas a JAH = Yahweh, el existente.
Este es el único lugar en el Antiguo Testamento donde el nombre de Jehová se usa en esta forma; en todos los demás casos, se menciona como SEÑOR.

El pueblo de Dios en el Antiguo Testamento consideraba el nombre de Jehová demasiado sagrado para ser pronunciado o escrito completamente.

Pero aquí, en referencia a los huérfanos y las viudas, se revela un conocimiento íntimo y cercano.
Él es conocido por Su carácter, por Su nombre.

• Él es Padre (Ab) – El protector benevolente de aquellos que no tienen padre.
• Él es Juez (Dayan) – La puerta de la vida para la viuda.

La palabra “viuda” aquí significa “atada en su dolor”, como una gavilla de trigo atada firmemente.

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Para la viuda atrapada en su dolor, Él es Elohim, el Fuerte, el único que restaura la vida.
¡Qué imagen tan poderosa!
Como viuda, cuando me siento atada, incapaz de hacer lo que debo hacer, atrapada en un torbellino de emociones, Él lo entiende.
Él está obrando para restaurar la vida.
Él ofrece un camino único para conocerle y ser conocida por Él en estos tiempos difíciles.
Él es el único que conoce el camino a la puerta de la vida después de la pérdida.
Déjale obrar.